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En
algunas ocasiones, la primera pregunta que hubiera querido hacerle a
alguien que se autodenomina capaz de vaticinar sucesos futuros es esta,
¿me conviene saber lo que usted me dirá?.
No es una cuestión menor, existen muchas formas de encarar una consulta
astrológica, casi tantas como personas que las realizan, algunas sientan
catedra sobre los sucesos que están por venir, y les trae al fresco lo
que sentirá o no al respecto la persona que realiza tal consulta.
¿En primer lugar hay que ser claro, se ven tendencias en un horóscopo
personal? SÍ, sin duda que se observan, ¿se ve que tipo de energías
afectaran a la persona? TAMBIEN, ¿se ve como la persona reaccionara ante
las eventualidades que se observan en la interpretación?
AFORTUNADAMENTE NO, afortunadamente, porque de ser capaces de conocer
con certeza la reacción del consultante, la libertad estaría atrapada en
las manos del consultor.
La libertad es un bien que tendríamos que cuidar con mimo, tanto quien
consulta como el consultor, una vez se vaticina algo y la persona que
atiende la consulta asiente y acepta, se crea un vínculo.
Pocas cosas son tan perturbadoras como la intromisión de un mal consejo dado por alguien de nuestra confianza.
La persona que se presta a
escuchar lo que determinan sus astros, tiene que colocar las cosas en su
lugar correspondiente, el astrologo no adivina, conoce las influencias y
deduce, algunos por una aguda intuición pueden colocar las influencias
en el contexto de la vida del consultante con cierta facilidad, pero es
necesario que la persona que realiza la consulta aplique la
interpretación a su vida, es necesario un papel activo del consultante
para obtener resultados óptimos.
Las influencias cíclicas que se observan en una consulta de astrología son una herramienta útil y práctica.
Muchos creen que estamos practicando un acto de magia, algunos creen que
es algo místico, lo cierto es que conocer cuando comienza un momento de
abundancia es una ayuda real, si lo conocemos en un momento de escasez
nos ayuda a sobrellevarla, ayuda a optimizar el futuro, y a muchos les
abre los ojos a esta realidad que es lo cíclico y cambiante de la vida, a
conocer sus flujos y “navegar” con el viento a favor o en contra si es
el deseo del consultante.
Queda claro que una consulta astrológica es algo útil y eficaz, aunque
la persona tiene que ser capaz de no dejarse influenciar por el
consultor, tiene que sentirse tan libre al entrar a consultar como
después de la consulta, porque si alguien deja aunque sea una pequeña
parte de su voluntad o de su libertad de decidir en ese acto,
seguramente habrá perdido más de lo que pueda haber ganado conociendo lo
que le depara su futuro.
Un individuo que se encontraba pasando un momento de inquietud extrema,
no podía permanecer en su patria y se aventuró a tierras lejanas,
pregunto a un adivino, -¿podría aclararme si encontrare fortuna, amor,
felicidad en mi viaje por tierras lejanas?, el adivino realizo su ritual
y le contesto: a sus preguntas sobre su destino en tierras lejanas solo
puedo decirle que NO a todo lo que consulta, no obtendrá aquello que
busca, no encontrara suerte ni fortuna ni amor, y después concluida la
consulta no dijo nada más, ¿fue acertado el adivino? SI, pero INUTIL, lo
útil es explicar que el viaje será más fácil en otras fechas, explicar
que aunque no se logre el objetivo se lograra la experiencia suficiente
para que en el próximo viaje las cosas SI salgan de manera acertada,
HABRIR PUERTAS, NO CERRARLAS.
Si desean una consulta personal pidan cita, pueden hacerla por Skype u otro medio,
wassapp: +34625707717
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