HOROSCOPO DE BENEDICTO XVI Y su imagen de dios

Horoscopo de Benedicto XVI

De la misma manera que cualquiera tiene una manera personalizada de relacionarse con el entorno o de vestir, todos tenemos una determinada imagen de lo trascendente, de la divinidad o de Dios.

En la carta natal de Benedicto XVI ocurre lo mismo, lo que sucede es que en el caso particular de esta persona su imagen tiene una proyección de poder, influyendo den grandes masas de personas que depositan su fe y esperanza en su manera de interpretar el mensaje de la divinidad.

Beneditdo XVI tiene estos datos de nacimiento:

Nace en Markl, Alemania, el 16 de abril de 1927 sobre las 04:15

En el momento de su nacimiento Júpiter en piscis se encuentra junto al ascendente, esto significa que su personalidad (Ascendente) esta plenamente identificada con las características de este planeta en este signo, cosa curiosa sin duda puesto que piscis (Los peces) es el signo que representa la religión católica y júpiter el planeta que cronológicamente se identifica con la necesidad de trascender, siendo importante en cualquier individuo con tendencias a lo religioso.

Es sin embargo un individuo perteneciente al signo de Aries, ademas tiene el sol en el sector numero 1, por lo tanto se le puede identificar por una personalidad directa e incluso beligerante, un individuo con necesidad de imponerse a los demás.

Ocurre también que nace con la luna llena, y claro si el Sol esta en Aries la luna se encuentra en libra y sector 7, esto es una especie de contradicción, la Luna en Libra es un síntoma de dulcificacion en las relaciones con los demás, por otro lado muestra una necesidad vital de llegar a acuerdos con aquellos que se le oponen, en muchas ocasiones por coacción y no por convencimiento (Luna cuadratura pluton) tendrá o habrá tenido que delegar su particular forma de ver las cosas y como digo a la fuerza.

Este ultimo aspecto mencionado, la cuadratura de la luna con Pluton ejerce una poderosa influencia en sus relaciones, puesto que sucede desde libra y casa 7, justo el lugar que se emplea para tratar con los demás, sin duda su particular aspecto siniestro se debe a esta configuración que se identifica con una necesidad compulsiva de dominio, aunque como digo no necesariamente de el hacia los demás, es mas que probable que una gran parte de su vida el sometimiento a un poder superior lo marcara de forma profunda, posiblemente se trata de una persona muy creyente en la polaridad del mal y el bien.

Tal y como sucede con los papas anteriores tiene un componente importante de tauro,(Venus en tauro y casa 2) que viene a significar una necesidad primaria de tener cubiertas las necesidades materiales, esto me parece especialmente curioso, pero ¿Quien podría pensar que la iglesia católica nombrara un jerarca con tendencias altruistas?.

Pero pasemos al aspecto que nos interesa, su sector numero 9, en ese lugar vemos que imagen tiene de Dios, osea quien es Dios para benedicto XVI. Pues bien el actual papa tiene a Saturno en el sector 9.

Saturno representa la restricción, a los partidos conservadores, la estructura rígida de las instituciones o de cualquier otro tipo, es algo así como aquello que pretende solidificar y crear una base o estructura solida.

Bien pues ya tenemos que tipo de Dios es el que siente el papa, Benedito XVI ve a dios como un ser de creaciones inmutables, con ideas conservadoras y rígidas sobre la fe, un ser que no esta abierto a lo nuevo, un juez duro que no permite soltar las riendas de sus hijos amados, con una serie de doctrinas concretas y fijas.

Curioso es comparar su tema natal y su forma de ver la divinidad con su predecesor, este tenia a Pluton en el sector 9, sin duda su forma de ver a dios era muy diferente, para Juan Pablo II Dios era un ser con la capacidad mágica de cambiar las circunstancias, un dios con un grandioso poder, un ser mucho mas apasionado con lo que desea, algo parecido al dios del antiguo testamento, pero sin tanta mala uva.

En fin, Dios es algo que cada cual siente de forma personal pero cuando vemos la carta de aquellos en los que cientos o miles de personas delegan su voluntad sean de la religion que sean, podemos comprender mejor hacia donde quieren dirigirlos.